Ads 468x60px

2 de febrero de 2017

Otro amigo más...

...que entristece el corazón de la Nación Chichas.


Por: Carlos Choque López
El:  02/02/2017

Hace pocos días partió al más allá uno de los amigos más queridos y queribles que conocí, fue de los primeros (cuando mis padres decidieron establecerse en la Joya Bella de Bolivia, a principios de los 70) amigos del barrio, de hecho fue uno de los que me invitó para que sea parte de su agrupación juvenil “Los Pajas”, que posteriormente fue modificado y quedó como “Pahajas Club” (por razones de fuerza mayor dicen los amigos), lindo grupo, futbolistas todos ellos, llegaron a vestir orgullosamente la “azulgrana” la gran mayoría, él fue nuestro gran guardameta (era reacio a usar guantes, así nomas es mejor y más cómodo, decía).

Boris Valverde Aguirre, de nombre, todos le conocían por su apodo, “Botija” y últimamente “Inge”, este último mote le pusieron cuando empezó a trabajar en Catastro (en la alcaldía), unos le decían “Arquitecto” y otros “Ingeniero”, hasta que un día les dijo: haber che, pónganse de acuerdo... o soy arquitecto o Ingeniero, obviamente quedaba más “Cool” ingeniero y así quedó como “Inge” Valverde.

A corta edad quedó huérfano de padre, pero se las ingenió para seguir adelante. Recuerdo que una época se fue a vivir al norte Argentino (tenía hermanas que vivían allí), volvió jovenzuelo pintón (todo un galán) le decíamos “Sandro” porque tenía los labios similares al cantante Argentino, trabajó a temprana edad en las siguientes instituciones: Empresa Nacional de Ferrocarriles, Banco Minero, Servicio de Caminos y finalmente, recaló en el gobierno municipal, donde últimamente estaba trabajando.

Cómo olvidar sus inicios futbolísticos (según cuentan los “rejas”), los hermanos Oropeza López (Feli, Pompo, Pesco y Ame que también era “Pajero”), grandes futbolistas, le “foguearon” (a puro blancazos para que sea buen arquero, decían) en lo que actualmente es el “Colegio Antofagasta”, (había una cancha improvisada donde jugaban los muchachos del barrio), no se equivocaron... resultó bueno.

Llegó a ocupar la cartera de secretario de cultura de los “Pahajas”, (cargo tan vilipendiado últimamente en la alcaldía de Tupiza), resulta que el “Botija” estaba a cargo de los balones del equipo, en una tarde de esas (todos los muchachos en etapa de “calistenia”), esperaban que llegue nuestro amigo con los balones para arrancar el juego, grande fue la sorpresa al ver que vino sin ellas (las pelotas también sufren un desgaste natural por el uso, a veces se pinchan, revientan o la costura también sufre su deterioro, dicen los que saben), en esa ocasión se quedaron sin la “Redonda” (caprichosa protagonista principal de los partidos de fútbol), la pregunta de rigor: ¿y las pelotas?, le dijeron, él todo tranquilo respondió: las dos están mal, hay que arreglarlas... a una le falta el “blader” y la otra está descosida, ya no sirve el cuero (contundente el amigo), más no faltó alguno rápido de reflejos, que le retruco (creo que fue el Peluso), pero debías sacar el “blader” de una y colocarle a la otra (sonaba lógico), pero nuestro arquerito amigo, sin despeinarse, le dijo: lo que pasa es que al “blader” se le veía el aire, por eso no le puse ¿…?, un capo nuestro “Botija” amigo, (anécdota que le catapultó para ostentar el cargo en forma vitalicia).

No todo era fútbol, también solíamos divertirnos organizando fiestas con las “Chicas del grupo”, en una de esas recepciones sociales posamos para la lente de un fotógrafo (imagen retratada en blanco y negro), los del grupo todos felices, el problema se suscitó cuando recogimos la fotografía, resulta que nuestro amigo “Botija”, salió abrazando a una piba (que según decía, era su enamorada), y al otro lado estaba otro amigo, al que le apodábamos “Cielito”, tomándole la mano a la “misma” chica, ¿qué tal?, ligera de reflejos resultó la amiga, más habilosa que el “Quesito” Tapia, se bajó “dos pajeros amigos” en uno (diría en su programa de TV la “Señorita Laura”, que pase la desgr...), en fin cosas de la vida.

Otra faceta que quiero resaltar, es que era un “gran asador” (principalmente cordero y chancho a la cruz, eran su fuerte), ganó en varias oportunidades concursos realizados por el gobierno municipal (autoridades políticas de rango alto, degustaron estos manjares), lamentablemente, nunca se animó a hacer para su comercialización, solamente en eventos especiales. Yo tuve el gusto de probarlos y realmente tenían buena sazón, (nuestro degustador oficial, “Alvarenga”, si los probó, me dará la razón).

No recuerdo que alguna vez haya tenido problemas con alguien, era tranquilo, (era más bueno que el pan, diría el “Panadero” Díaz), se reía de todo lo que le decían, así quiero recordarle a este gran amigo, pues estoy seguro que los que le conocieron, comparten lo que digo.

Descansa en paz Boris Valverde Aguirre
(miembro que enalteció a los “Pahajas Club”)

Gracias por las fotos que sirvieron para este homenaje póstumo a “Grillo” y “Walicach” .

Saludos.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Gracias por dejar tu comentario.

Lo que opinas sobre nuestras publicaciones, es una motivación para seguir compartiendo contigo.